Barrel of a Gun

Dis­lo­qué mi aten­ción. Un estí­mu­lo no suce­de a otro en orden. Sin la ansie­dad de la suce­sión. El can­to es más soni­do que len­gua­je. Hay rit­mo pero es com­ple­ta­men­te dis­tin­to, sin anti­ci­pa­ción: cada gol­pe de tím­pano es una sor­pre­sa y un estre­me­ci­mien­to. Algo tin­ti­nea rever­be­ran­do y el estre­me­ci­mien­to con­mue­ve, es la emo­ción mis­ma, sin tiem­po, des­bor­dan­te pal­pi­ta oídos ore­jas como los gatos como la mari­gua­na los bajos la bar­bi­lla en la esca­le­ra de metal.

2 comentarios en “Barrel of a Gun”

  1. En cuan­to al habla… no la músi­ca, dice un escri­tor “Las úni­cas pala­bras que mere­cen exis­tir, son las que son mejo­res que el silencio”.
    (Y todas las tuyas lo son)

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *