Vivo junto a un eje donde corre el Metrobús. Nunca he comprendido cómo los ciclistas se animan a agarrar ese carril donde va esa bestia a tan alta velocidad. En bici trato de no usar ejes viales a menos de que traiga piernas para no soltar el carril (la ley lo permite). Y aún así no falta el psicópata que se siente con el derecho de aventarte lámina. Es indignante que alguien sienta el tonelaje de su vehículo como fuerza propia y pretenda amedrentar con ella. No es un ciclista el que te estorba, es un hijo, esposo, novia, padre, tío, nieto o un vecino.
Cabe resaltar el valor civil de quien hizo el video y puso la queja contra el Metrobús. El fenómeno de la ‘invasión’ de esos carriles tiene que ser atendida de manera integral no con el peso bruto de las unidades.
Apuesto que el tipo se siente un héroe…
Su acción de distraer al chofer puso en riesgo a todas las personas que viajaban en ese autobús, soy ciclista urbano, prefiero la bici por sobre el automóvil y conozco a muchos ciclistas más, y nadie usamos el carril de metrobus, llevar una bicicleta o te da súper poderes para vencer automovilistas… hay que tener sentido común
Coincido Manuel. En mi círculo cercano tampoco conozco a alguien que ocupe el carril del metrobús. Paradójicamente quienes más lo usan son quienes no se sienten con la seguridad para circular en la calle con los demás vehículos. El miedo y la inexperiencia acaban aconsejando mal.
Hoy salió una nota en twitter de cómo las invasiones ciclistas en el carril del metrobús hacen que las unidades tengan que disminuir su velocidad, afectando el de por sí pobre y rebasado servicio. Al menos ya los operadores no están sacando al microbusero que fueron antes. Creo que Metrobús y la policía tendrían que trabajar de manera coordinada para que no se den invasiones y asegurarse de que sean respetados los derechos de los ciclistas en la calle. Gracias por comentar. Saludos.